Vivimos en una época de constantes transformaciones: en el trabajo, en las relaciones, en la comunicación. También en la TV noto que algo está cambiando.
Pocos son los programas que resisten el paso del tiempo, aparte de Saber y ganar, Pasapalabra, o Sálvame. Algunas cadenas, como TVE, tienen verdaderos problemas con ciertas franjas horarias. Prueban diferentes formatos, algunos con presentadores potentes, pero nada les funciona. La tarde de la 1ª sería un ejemplo. Ni siquiera LETRIS, presentado por mi admirado Carlos Latre, ha funcionado. Pero claro, es que Latre es imitador, no presentador. El mejor imitador habido y por haber, pero eso no lo avala para presentar un concurso, tal y como ha quedado demostrado.
Otras cadenas, como T5, apuestan a caballo ganador: realities a diestro y siniestro: tras GH, ahora ha llegado el CAMPAMENTO. Saben lo que les funciona, y lo ponen en práctica. O en su parrilla, mejor dicho. Y siempre aciertan.
En A3 los veo más perdidos, como si no supieran hacia dónde ir. No tienen programas estrella, aparte de TU CARA ME SUENA (gran acierto) ni presentadores destacados, aparte de Matías Prats. Creo que no tener una identidad clara les perjudica. Así como la seña de identidad de T5 es el reality/cotilleo/griterío, A3 no tiene ninguna. O no soy capaz de verla.
Si nos centramos en los presentadores / conductores de éxito / personajes mediáticos, ¿qué nos encontramos? Nos encontramos a Chicote, un hombre que nos ha enganchado por hablar claro y directo, sin tapujos. Siguiendo la estela de Risto Mejide, por poner otro ejemplo que nos engancha. Ninguno de los 2 es periodista y, sin embargo, son grandes comunicadores y entertainers. Ésa es una de las transformaciones a las que me refería antes. Hay que dar oportunidades a gente capaz de aportar valor añadido. Creo que el perfil del nuevo presentador (que no necesariamente periodista) ha de ser otro: alguien capaz de improvisar, de aportar su personalidad y su espíritu al programa, alguien diferente, un artista más completo, alguien con perfil de ENTERTAINER.
Yo veo a alguien como Ana Rosa Quintana, Mariló Montero o Susanna Griso, y lo único que veo es que conducen un programa de manera correcta, saben lo que tienen que hacer y lo hacen. Pero no aportan nada. No tienen frescura, quizás sea ésa la palabra. Puede que la hayan perdido, si es que la tuvieron alguna vez. En el lado opuesto estaría Mª Teresa Campos, la reina indiscutible de la TV, y no veo a nadie con cualidades para relevarla. Ella se adueña del programa, sea cual sea el formato, es su alma, sin ensombrecer a los invitados ni a los colaboradores. Sabe dar a cada uno su espacio. Y ella siempre brilla.
Habiendo tantas cadenas de TV, me parece digno de reflexión que alguien como Mª Teresa Campos no tenga candidatas a sucederla. Y si conocéis alguna, agradeceré me rectifiquéis.
Nada más por ahora...y nada menos. La TV me apasiona y siempre me apetece como tema.
Hasta pronto!